sábado, 6 de septiembre de 2008

UNA PRINCESITA PARA UN GRAN REY

                                          NALA
Por fin está en casa. Hace tan sólo unas horas pasó a formar parte de nuestra familia. El reencuentro fue como hace un mes, en su caja de cartón, pero esta vez más calmada no quiso saltar. Tranquila y observadora clavaba su atenta mirada a todo su alrededor tratando de entender qué pintaba en aquél lugar.
Como auténticos padrazos la fuimos presentando en sociedad, a propios y ajenos, como si de una joya se tratara.
Este... bueno... seré sincero ya que me considero más objetivo. Una joya, si, pero por pulir. Por más que intentaron convencerme de que el olor que desprendía no hedor sino producto de un spray antiparásitos... mi instinto me decía que había algo más ahí debajo de su largo y atigrado pelaje. Y lo había, Dios si lo había, una larga ducha y tres intentos de enjabonado para conseguir la ansiada espuma que anunciaba que la higiene que necesitaba había llegado corroboraban mi teoría.
Se ha portado como una campeona, maullando un poco como cualquier bebé en su bañera, pero no ha intentado escapar ni arañar. Y como cualquier bebé envuelto en su toalla, la secaba y acurrucaba intentando calmar sun temblores.
Qué trauma!!! Imaginad, caras nuevas, casa nueva, un fregado a 4 manos... y para colmo un rey en palacio, y vaya rey : Sir Wazz I, 5 años mayor que ella y con todo lo que significa este ser de cuerpo felino, encriptada mente y actitud divina.
Ahora su sedoso y largo pelaje brilla y huele como una auténtica princesita merece.
Una princesita bebé, no lo olvidemos, un bebé que se ha pasado toooooooooda la noche maullando. Ése sonido que parece ser el hilo musical de la noche y se apodera lentamente de mi cabeza como si lo hiciera dentro de ella; por supuesto que lo parecía: SE HABÍA METIDO BAJO EL CANAPÉ Y ESTABA TUMBADA BAJO MI CABEZA!!!!!! ¿Cómo es posible que se metiera si es un canapé, sólo hay apenas 3 dedos hasta el suelo?
Supongo que el sueño que me ha acompañado toda la mañana en el trabajo no era equiparable a la mezcla de angustia y curiosidad por volver a casa y comprobar como se les habia dado la mañana a los niños, la faena seguro no la habrían hecho pero algún destrozo...
Al volver a casa, como cada vez que se abre la puerta nos recibe Sir Wazz pero... ¿ y Nala ? ¿ ande andará? ,¿ Bajo el sofá?, ¿Bajo el mueble?, ¿Bajo el armario? Nooooo, BAJO EL MOTOR DE LA NEVERA!!!
Por favor, que crezca de una vez y no se cuele por estos sitios que me va a dar algo y eso que sólo lleva 20 horas en casa.
Ahora sólo queda esperar y esperar que la indiferencia que se procesan se convierta en sana complicidad.
Por cierto: hoy Wazz no ha dejado su amarillenta y líquida huella en ninguna baldosa de casa... algo es algo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Laly:
Enhorabuena padrazos, habeis tenido una gatita preciosa, justo a medida del gran rey de la casa, y como no acorde con sus padres. Disfrutarlaaaaaaa!!!!!!!